Capítulo4: El Paraiso
Ante sus ojos se abría un paisaje de ensueño, se trataba de una hondonada pequeña, de unos veinte metros de lado, con paredes de piedra virgen prácticamente verticales y de una altura de cuatro o cinco metros, en lo alto de ellas se veía una maraña de plantas que hacia imposible que alguien se asomase al borde.
De una de las paredes emergía un río subterráneo, que formaba una pequeña balsa que ocupaba una cuarta parte del espacio disponible, el suelo era de musgo, como una alfombra en el resto de la hondonada y en el extremo opuesto a la laguna se veía una pequeña cabaña que aprovechaba una hendedura natural en la roca. En medio del lugar había un enorme sauce llorón, que se elevaba por encima de las paredes de roca, protegiéndolos de miradas desde el aire, pero dejando pasar los rayos del sol en esa tarde de comienzos de verano.
Naruto la miraba con una mezcla de satisfacción y ansiedad en la cara,-bueno, ¿que te parece mi regalo?
Ella no pudo responder, lo abrazó de un salto y juntos rodaron por el musgo. No recordaba una época más feliz en su vida. Allí, en ese lugar apartado, con el chico a quien llevaba amando desde que tenía memoria, recordó cuando le había dicho que le quería por primera vez, allí en el banco del parque, recordó las tardes e habían pasado juntos, paseado por Konoha, aquel primer encuentro cuando ella le había dicho que le quería desde siempre...
Allí pasaron lo que quedaba de tarde, juntos, sobre el musgo, y cuando empezó a refrescar entraron en la cabaña. La parte de delante era una fachada de madera, de un par de metros de profundidad, tenía puerta y un par de pequeñas ventanas. Dentro solo había una estancia de unos cuatro metros de lado, con una chimenea cuyo tiro ascendía entre la roca virgen en diagonal, adentrándose en el bosque. También había un armario, con mantas, candiles y otras cosas. El fondo de la casita era de piedra, con el techo en una curva que empezaba a algo más de dos metros de altura y descendía suavemente hacia el fondo, donde había un jergón lo bastante grande para dos personas.
En la chimenea hervía una olla de a que salía un delicioso aroma a ramen, y en el centro de la estancia había una piedra cuadrada sobre la que estaban dispuestos los cubiertos para la cena.
-¿Cómo es posible?¿quién ha preparado todo esto?-Dijo Hinata sorprendida.
-Yo, bueno, más bien nosotros, me temo que hice un kage bunshin esta mañana y he tenido un par de copias mías trayendo cosas aquí y preparando esta cena para nosotros.- Repuso él con u sonrisa de felicidad suprema al ver su asombro.
Ella lo abrazó con todas sus fuerzas, Naruto, pese a su debilidad, había mantenía dos copias suyas todo el día para hacer que su sorpresa fuera perfecta. ¡Pensar que ella había dudado de si solo sería una broma!
Se pusieron a cenar el Ramen que habían preparado las copias de Naruto, que estaba delicioso, y cuando Hinata ya estaba saciada, y Naruto iba por el tercer cuenco y empezaba a bajar el ritmo de ingestión al fin le pidió que le explicase que había pasado durante la semana que estuvo perdido.
-Bueno, Kakashi y yo estábamos patrullando la zona en busca de rastros de Orochimaru, cuando vía que se movía una zarza, me acerqué a investigar, pero no había nada, tan solo se veía un agujero en la roca de detrás de la zarza. Así que me introduje por el y aparecí aquí. Resultó que lo que había llamado mi atención era un conejo, que se paseaba entonces por este lugar. pensé en avisar a Kakashi de la existencia de este lugar, pero no parecía que hubiese habido nadie aquí nunca, así que luego se me ocurrió que el sitio te gustaría, y decidí acondicionarlo un poco, lo malo fue que cada vez se me ocurrían más cosas que hacer, limpié completamente de ramas y hojarasca el lugar, hice una pequeña presa para formar la laguna, podé las ramas más bajas del árbol para que hubiese más espacio y más claridad, y construí la cabaña aprovechando la chimenea natural que había en la roca, en el otro extremo planté arbustos para que disipasen el humo.Hinata estaba encantada, había pasado una semana enfrascado en arreglar ese lugar para ella, olvidándose de la misión incluso, solo porque había pensado que a ella le gustaría. Esa noche la pasaron allí, cubiertos por una de las mantas del armario, abrazados y con una sonrisa de satisfacción en sus caras.
3 Comments:
Esperando el proximo capitulo ... me gusta como escribes ! ^^
Salu2 !
hola! me encanta tu fic, a ver si lo continuas pronto eh?
por cierto, xq dices al principio que es malo? a mi me gusta muxo;)
La historia continuará, tranquilos, pero estos días no andaba yo para escribir, el jueves fué mi cumpleaños y el viernes le celebré por todo lo alto, ahora estoy terminando de recuperarme, y mañana a más tardar continuaré.
Muchas gracias por vuestro apoyo.
Si dije que era malo fué porque soy nuevo en esto y no sabía como iba a salir
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